El buen centauro

Crono, que estaba casado con Rea, se enamoro de la ninfa Filira. Sin embargo ella lo rechazo y para escapar de su acoso se transformo en yegua. Cuando Crono se entero se convirtio a su vez en caballo y consiguio poseerla. De este amor forzado nacio Quiron, un centauro, inteligente, sabio y de buen caracter, a diferencia de la mayoria de los de su clase, que son violentos y de costumbres brutales. Fue un gran educador en música, arte, caza, moral, medicina y cirugía, y tutor de los héroes Aquiles, Asclepio, Teseo, Jasón, Aristeo y Acteón. Su fama de medico sabio y prudente corrio por toda Grecia. Hercules le disparo accidentalmente una flecha envenenada con la sangre de la Hidra en el transcurso de una lucha con los centauros, que huian hacia la morada de Quirón. Este contrajo una dolorosa herida incurable, que le llevo a ceder su inmortalidad a Prometeo, para poder morir y escapar del dolor. Fue ascendido al cielo como la constelación Sagitario.